D esafortunadamente para el sector de la automoción, la pandemia del coronavirus le ha asestado un duro golpe a la industria nacional e internacional, que poco a poco lucha por recuperarse tras unos meses difíciles. Las cifras de ventas de vehículos nuevos en nuestro país no comenzaron mal el año, aunque es cierto que pudimos apreciar una leve caída en las cifras del 7,6% respecto a 2019, con un total de 86.443 automóviles vendidos en el mes de enero.
En febrero la caída fue menor, de apenas el 6%, con un acumulado de 181.063 coches comercializados en los dos primeros meses del año. Por el contrario, el cierre de los concesionarios en marzo debido al confinamiento incrementó la caída hasta el 69,3% respecto al mismo mes del año anterior, con un total de 37.644 unidades vendidas y un acumulado de 218.705 ejemplares.
La tendencia se mantuvo a la baja durante el mes de abril, donde las ventas de vehículos nuevos alcanzaron mínimos históricos. Con 4.163 unidades entregadas a los usuarios, vimos una caída del 96,5% en las cifras respecto a 2019. Por suerte, el sector comenzó a ver la luz al final del túnel a lo largo del mes de mayo gracias a la apertura de algunos concesionarios, donde se registraron 34.337 matriculaciones, ascendiendo el acumulado hasta los 257.202 coches vendidos. La caída respecto a mayo de 2019 fue menor, del 72,7%.
En el mes de junio, ya con prácticamente todos los concesionarios abiertos, se moderó la caída y las ventas de vehículos nuevos en España se recuperaron hasta un descenso del 36,7% en comparación con el mismo mes del año anterior, un dato que situó el volumen total en las 82.651 unidades. Llegados a este punto, el balance del primer semestre del año no fue tan malo como auguraban las previsiones, con una cifra total de matriculaciones de 339.853, una caída del 50,9% respecto al año anterior.
Una vez el sector se fue adaptando a la nueva realidad, aparecieron los primeros brotes verdes y la industria del automóvil inició su recuperación en el mes de julio, que fue el primer mes en positivo del 2020. A lo largo de julio, las ventas de vehículos nuevos en España registraron un repunte del 1,1% respecto al mismo mes de 2019, llegándose a las 117.929 unidades. El acumulado anual muestra unas ventas de 457.782 unidades hasta julio, una caída del 43,4% respecto al año anterior.
Durante la primera mitad de agosto la tendencia también se mantuvo al alza, aunque finalmente el mes cerró con un descenso del 10,1% respecto a agosto de 2019. El acumulado alcanza los 524.706 ejemplares, cantidad que se estima que se incremente de forma notoria en los meses siguientes.
La crisis sanitaria causada por el COVID-19 «nos ha robado» más de tres meses de normalidad en los concesionarios y, aunque la situación ha mejorado bastante, todavía queda trabajo por hacer.
Las ayudas como factor determinante para incentivar la venta de vehículos
Como acabamos de ver, la crisis sanitaria causada por el COVID-19 «nos ha robado» más de tres meses de normalidad en los concesionarios y, aunque la situación ha mejorado bastante, todavía queda trabajo por hacer. Para paliar la situación, desde el Gobierno se ha lanzado un paquete de incentivos que se centra en la renovación del parque móvil, la formación y la transformación digital de la industria
Bautizado como Plan de Impulso a la Cadena de Valor de la Industria de Automoción, el paquete de ayudas contiene 21 medidas estructuradas de tipo económico, fiscal, normativo, logístico, de competitividad, de formación y cualificación profesional, de compra pública sostenible y de planificación estratégica que dan cobertura a toda la cadena de valor de la industria. La elevada dotación presupuestaria asignada a este fin revela la notoriedad del Plan, con un total de 3.750 millones de euros, de los cuales 1.535 millones se movilizarán en 2020 y 2.215 millones a partir de 2021.
Las medidas de este Plan se articulan en torno a cinco grandes pilares:
- Renovación del parque de vehículos hacia otro más moderno y eficiente, incentivando las ventas de vehículos nuevos (Programas MOVES II y RENOVE 2020).
- Inversiones y reformas normativas para impulsar la sostenibilidad y la competitividad
- Investigación, desarrollo e innovación para los nuevos retos.
- Fiscalidad para impulsar la competitividad del sector.
- Medidas en el ámbito de la formación y cualificación profesional.
A nivel europeo, los distintos países también han puesto a disposición de sus ciudadanos paquetes de ayuda para adaptarse a esta nueva realidad e incentivar la venta de vehículos nuevos, aunque en la gran mayoría de los casos se trata de incentivos a la compra de coches eléctricos. Desde las instituciones de la Unión Europea han aportado su granito de arena con el “Fondo de Recuperación-Next Generation EU”, cuyo objetivo es «modernizar, descarbonizar y digitalizar el sector de la automoción«.
Si estás buscando la forma de amortiguar la situación del sector a través de la transformación digital en tu organización, es el momento de aprovechar las ayudas del Gobierno: 415 millones de euros se invertirán en la «investigación, desarrollo e innovación, con el impulso a la digitalización, conectividad y soluciones innovadoras en la movilidad sostenible y su industria asociada«.